La empresa The Coca-Cola Company decidió frenar toda publicidad en redes sociales por 30 días para analizar sus estándares y políticas de publicidad para determinar si hacen falta nuevos filtros de supervisión interna.
Esto a consecuencia de las críticas volcadas a empresas, cuyas campañas de publicidad han sido señaladas por contener discursos de odio. Al respecto, Coca-Cola expresó en un comunicado que “se tendrá que analizar qué más debe esperar de sus socios de redes sociales para deshacerse de las plataformas de odio, violencia y contenido inapropiado”.
Por lo que Coca-Cola tomará acciones a la brevedad para mantener una mayor responsabilidad social y mostrar transparencia en su comunicación.
Más empresas de talla internacional como Unilever, Patagonia o North Face, han tomado la misma decisión de transformar sus estrategias de publicidad luego de la polémica por el contenido promoviendo el odio.
La Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color y la Liga Anti-Difamación fueron quienes iniciaron esta campaña para combatir cualquier discurso de odio bajo el lema #StopHateForProfit.
Con respecto a esta polémica, el Jefe de las Políticas de Facebook, Nick Clegg mencionó que la plataforma “se opone enfáticamente a los discursos de odio” y resaltó la eliminación de más de 10 millones de posts en redes sociales, en el último trimestre, por contenido discriminatorio.