En los últimos años, Tailandia se ha ganado un lugar relevante en materia turística. A excepción de su bulliciosa capital, Bangkok, el territorio tailandés está conformado principalmente por panoramas idílicos para los visitantes occidentales, apenas intervenidos por la población local.

Beachub: trabajo al pie de la playa

Considerada a todas luces una “economía emergente”, Tailandia es un país que ha adquirido reciente relevancia en el panorama mundial debido a su exponencial nivel de industrialización y desarrollo económico. Como la segunda potencia económica del sureste asiático (sólo después de Indonesia), ocupa además el lugar 20 en el ranking de naciones a partir de su PIB.

Con una organización territorial dividida en provincias, Tailandia está rodeada de pequeñas islas que sobreviven principalmente del turismo, la pesca y la cosecha de cocos. Una de estas tiene por nombre Ko Pha-ngan, y es ahí donde se encuentra Beachub. Aunque reconocida por su Full Moon Party, un evento turístico que se realiza durante las lunas llenas en la bahía Hat Rin, Ko Ph-ngan también alberga una comunidad de emprendedores y nómadas digitales, quienes ven en Beachub la mejor combinación entre el ocio y la productividad que sólo un sitio al pie de la playa podría ofrecer.

Con la propuesta clara de trabajar sustentablemente fuera del estrés de la ciudad, Beachub es un espacio sin dudas rústico: hamacas, palmeras y mesas de madera reciclada recuerdan más a un hostal que a un espacio de coworking. No obstante, este lugar cuenta con excelente conexión de fibra óptica, salas ejecutivas de reunión con aire acondicionado, café y agua ilimitados. Además, como todo sitio tan cercano al mar, Beachub tiene regaderas y también ofrece un menú semanal de comida saludable.

Pero trabajar en este lugar paradisíaco no es todo descanso: diariamente Beachub es sede de charlas sobre trabajo remoto, socialización de proyectos de emprendimiento, Machine Learning, herramientas de colaboración e incluso festivales de danza. Los paquetes de este espacio son singularmente flexibles, más similares a un hotel turístico que a un espacio de coworking: para tener acceso a un escritorio cercano a la playa, el emprendedor o empresario puede pagar diaria, semanal o mensualmente. El costo de una membresía mensual es de  6,500 THB, aproximadamente 215 dólares estadounidenses.